SINOPSIS
La película comienza con el padre de Mathayus, Ashur de
Akkad, luchando en la batalla. Él le dice a un joven Mathayus que no se afilie
a los Escorpiones Negros, los mejores guerreros del Emperador de Akkad, pero
Mathayus no le hace caso y se va a los juegos usados para reclutar niños para
unirse a los sagrados Escorpiones Negros. Durante los juegos Mathayus se
encuentra con su amiga de la infancia Layla, que desea luchar en la batalla al
igual que los hombres. Sargon, comandante del ejército, oye por casualidad la
conversación y detiene a Layla. Mathayus ataca a Sargon. Sargon está a punto de
ejecutar Mathayus cuando su padre lo rescata, pero es atacado por Sargon. La
batalla termina con el emperador Hammurabi perdonarlos, a cambio de que
Mathayus se una a los Escorpiones Negros. Esto deja a Sargon furioso. Durante
la noche, Ashur es asesinado por una maldición de Sargon. Mathayus se une a los
Escorpiones Negros y promete ser el mejor luchador, porque se da cuenta de que
es la mejor manera de conseguir la venganza.
Pasan los años y un adulto Mathayus está participando en la
ceremonia para unirse a los Escorpiones Negros. Se graduó como maestro de la
espada, la mejor en su clase. Durante la ceremonia son recibidos por el
emperador actual, Sargon, que ha asesinado a Hammurabi para apoderarse del
trono. Durante el saludo Sargon reconoce Mathayus y le invita a palacio. Esa
noche en el palacio, Mathayus declara su lealtad al emperador y es recompensado
con una noche con las concubinas del emperador. Al día siguiente Mathayus es
llamado una vez más al palacio, sólo para encontrar a su hermano Noa arrestado
por difundir los denominados "falsos rumores" sobre el emperador.
Mathayus idea un plan para escapar. Sin embargo, durante su escape Sargon
utiliza su magia negra y lanza una flecha "encantada", matando a Noa.
Mathayus luego se encuentra con su amiga, Layla. Escapan
juntos a Egipto en un barco. Durante el viaje se encuentran con un griego
llamado Aristófanes (o 'Ari' para abreviar) que se convierte en su nuevo cómplice.
Ari idea un plan para acabar con la "maldición" Sargon, la única
manera es ir al inframundo y recuperar una espada mágica de un héroe
legendario. Para ir al inframundo, primero tienen que matar al Minotauro que
custodia el portal que conduce al inframundo.
Mathayus consigue matar al monstruo con la ayuda de varios
presos que eran mercenarios y que tenía una deuda con su padre. Otro de los
ellos, un acróbata chino llamado Fong, se convierte en su nuevo cómplice. Para
llegar a los prisioneros a unirse en el viaje, Ari promete que el inframundo
está lleno de riquezas. Entran en el portal al inframundo, mediante un gran
rompecabezas que sólo Ari puede descifrar. Mientras caminan por el desierto del
inframundo, de repente se convierte en un pantano, lleno de cadáveres, trampas
y cuerpos totalmente despiertos. En el pantano sólo Fong, Ari, Mathayus, Layla
y uno de los prisioneros sobreviven. Una vez en el palacio de Astarte, diosa
del amor y de la guerra, se encuentran con la diosa Astarte, que trata de seducir
a Mathayus. Layla inicia una pelea con Astarte, y durante este enfrentamiento,
Ari y Fong consiguen la espada y el grupo escapa. Pasan a través del portal
antes de que pase una hora, evitando una maldición que les convertiría en
piedra, excepto el mercenario que permanece demasiado tiempo porque su codicia
lo lleva a tratar de conseguir un anillo de rubí.
Vuelven a Akkad, sólo para encontrar que Sargon planea
sacrificar a todo el pueblo a Astarte a cambio del poder de un dios. Para
lograr esto, Sargon encarcela a todo el mundo en el coliseo de la ciudad y los
quema vivos. Layla y Fong matan a los guardias y apagan el fuego antes de que
llegue a la gente del pueblo. Mathayus y Ari van a los aposentos del rey para
enfrentarse a él. Una vez que lo encuentran, Mathayus y Sargon lucha cuerpo a
cuerpo, mientras que Ari escribe los detalles de su poema épico. Mathayus pide
la espada mágica, pero Ari lo traiciona tirándole la espada a Sargon. Mathayus
usa la daga para romper la espada de Sargon. Ari le da a Mathayus la espada
real. Todo era parte del plan de Ari para engañar a Sargon. Ari le dice a
Sargon, "Nunca confíes en un griego". Sargon se transforma en el
monstruoso Rey Escorpión, pero después de una larga batalla Mathayus consigue
matar al monstruo. Astarte se enfrenta Mathayus, y amenaza con matarlo, y él le
dice que se unirá a ella muy pronto.
Al día siguiente, el hijo de Hammurabi se declara el
verdadero emperador. Mathayus finalmente besa Layla mientras se recuperaba de
sus heridas. Layla admite que ya no quiere llevar la vida de un soldado y
quiere sentar cabeza. La película termina con la narración de Ari, de cómo
ahora Mathayus prefiere vivir una vida de aventura y viaja en el desierto.
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